En 1964 la división Pontiac de la General Motors publicó el que vendría a convertirse en una de las mayores leyendas del auto americano: el Pontiac GTO. Digo publicó porque a lo largo de los años el GTO (o sus diseñadores) conservó (-aron) un sentido de la estética que a muchos hasta nos conmueve. Es extraño explicar el placer que algunos sentimos al ver un auto hermoso… me imagino que será algo similar a lo que sienten quienes se deleitan con antigüedades o los que se gozan con un buen partido de futbol (sigo diciendo que las selecciones de mujeres juegan un millón de veces mejor que los aburridores jugadores de millones de dólares, así me digan que lo hago de puro enfermo… jajaja…pero no es así, en fin). El asunto es que el GTO es hermoso y que hizo historia.
Para muchos fue el primer Muscle y sus ventas de decenas de miles al año tal vez fueron la causa de la batalla entre GM, Ford, y Chrysler que produjo por años tantos Muscle (espero que muchos de ellos pasen por aquí). DeLorean sabía que al poner un motor de alto desempeño en un auto mediano y con un diseño atrayente iba a hacer realidad el sueño de muchos (al fin y al cabo eso era lo que sucedía con los Hot Roads hacía años), así todo el mundo tuviera los ojos puestos en los autos de gama alta que por su peso se hacían demasiado lentos. El nombre fue un homenaje al Ferrari GTO (Gran Turismo Omologato), que hasta el momento había sido el único auto con esa denominación. Claro, no faltaron los puritanos que vieron el nombre como una ofensa pero en verdad nadie tenía idea de lo que este auto iba a representar.
Empezaré mi recorrido por los Muscle posteando los primeros diez años (¡los mejores!) del más famoso de ellos. Como ya dije no habrá muchas reseñas pero si muchas fotos.
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